El diseñador nos cuenta la importancia de resaltar al novio y cómo vivió la pandemia en lo laboral.

Por: Carolina De Luca.

Daniel Casalnovo es sastre y diseñador de indumentaria de hombre. Le gusta resaltar al novio en las bodas, ya que afirma que: “Hoy esperan al novio, no solo a la novia”. El rubro de la moda fue uno de los más golpeado por la pandemia, sin embargo, tiene deseos de abrir franquicias de su marca en diferentes puntos del país y en un futuro en el exterior.

¿Cómo repercutió la pandemia, y en especial la cuarentena, en el mundo de la moda?

—Fue el rubro más afectado. En mi caso soy sastre y diseñador de indumentaria de hombre y nunca me pasó este tipo de cosas, al igual que a nadie. Tuvimos que suspender 38 bodas de mi local de Barrio Norte. Todavía no contaba con el local de callao y en el de La Plata también suspendimos más de 20 bodas. Fue terrible el tema de la cuarentena para el mundo de la moda, porque no se hacían fiestas. Sé que hubo fiestas clandestinas, pero yo en esa no entré porque no quería problemas.

Sabemos que estuviste internado por coronavirus, ¿Cómo fue superar la enfermedad?

—Es una enfermedad inédita, donde nadie supo lo que era. Yo fui uno de los primeros conocidos en contagiarse, junto con Carmen Barbieri, Sergio Lapegüe, Sol Pérez y otros tantos. Estuve muy mal, fui internado en el Sanatorio de Los Arcos. La verdad no se donde me contagié, pero pienso que puedo haber sido el 31 de diciembre con familiares dentro de mi casa que pueden haber sido asintomáticos. El día 2 de enero volví de la costa, que había ido a trabajar, vine 4 horas manejando sin parar, por lo cual llegué con arritmia cardíaca, sin poder respirar. Fui a la Suizo y me internaron de urgencia con neumonía bilateral y arritmia cardíaca y me llevaron a Los Arcos, donde estuve un mes internado, aislado, con los médicos que no se acercaban por miedo a contagiarse. La verdad la pasé bastante mal y ni hablar de las secuelas que me quedaron.

¿Qué te inspira a la hora de hacer tus diseños?

—Me inspira mucho ver colecciones. No me gusta mentir, miro muchas colecciones de Carlos Pignatelli, que para mi es mi referente, y sobre eso le pongo mi mano. Puede gustarme un traje de Pignatelli, porque soy sastre, y a su vez le agrego algo mío. No lo copio, pero si observo y estoy siempre vigente en todo lo nuevo. Me gusta que cuando me elijan los novios se luzcan, porque hoy el hombre está a la par de la mujer, hoy esperan al novio, no solo a la novia.

¿Qué opinás del cambio que tuvo lugar durante los últimos años con respecto a la moda de hombre?

—La moda del hombre sigue exactamente igual. El hombre hoy es metrosexual y le gusta vestirse bien. Hay que dejar que el novio se luzca siempre, hay que tratar de vestirse bien, sin pasar al novio. Podes estar bien vestido con un traje negro y corbata, el moño va para el novio. Me parece que la moda del hombre está cada vez más superada, al igual que los hombres que se ponen todo encima y a veces creo que menos es más.

¿Qué opinás de la moda sin género?

—Me da exactamente igual. Nunca tuve algo que opinar sobre el género. Me parece genial que cada cual haga su vida, que se vista como quiera y que no haya prejuicios de nada. En este sentido soy muy abierto y muy amplio.

¿Cuáles son tus proyectos a futuro?

—Poner varias franquicias. Tengo idea de poner una en el Chaco, en Entre Ríos, en Ramallo y otra por Zona Norte. Y en cuanto pueda viajar también me gustaría abrir una franquicia en Miami.